HEPATITIS B

 

HEPATITIS B: 

La hepatitis B es una infección viral que afecta al hígado y puede causar inflamación, cirrosis o cáncer. El virus de la hepatitis B (VHB) se transmite por contacto con la sangre o los fluidos corporales de una persona infectada.

CLASIFICACIÓN: 

La hepatitis B se puede clasificar en dos tipos según la duración de la infección: aguda o crónica.

LA HEPATITIS B AGUDA : 

Es cuando la infección dura menos de seis meses y el sistema inmunitario puede eliminar el virus. Los síntomas pueden ser leves o graves, y algunas personas pueden no tener ninguno. La mayoría de las personas se recuperan completamente de la hepatitis B aguda.

LA HEPATITIS B CRÓNICA:

Es cuando la infección dura más de seis meses y el sistema inmunitario no puede eliminar el virus. Las personas con hepatitis B crónica pueden no tener síntomas o tener síntomas leves durante años, pero pueden desarrollar complicaciones graves como cirrosis o cáncer de hígado. Alrededor del 5% de los adultos y el 90% de los bebés que se infectan con el VHB desarrollan hepatitis B crónica.

EPIDEMIOLOGÍA:

La hepatitis B es una enfermedad global que afecta a unos 257 millones de personas en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La prevalencia de la infección varía según las regiones, siendo más alta en África subsahariana y Asia oriental, donde más del 8% de la población adulta tiene hepatitis B crónica. La OMS estima que en 2019 hubo 887.000 muertes por hepatitis B, principalmente por cirrosis y cáncer de hígado.

CUADRO CLÍNICO:

Los síntomas de la hepatitis B pueden variar según el tipo y la gravedad de la infección. Algunos síntomas comunes son:

Ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos)

Orina oscura y heces claras

Fatiga

Náuseas y vómitos

Dolor abdominal

Fiebre

Pérdida de apetito

Sin embargo, muchas personas con hepatitis B no tienen síntomas o tienen síntomas leves que pueden confundirse con otras enfermedades. Por eso, es importante hacerse pruebas para detectar el VHB si se tiene algún factor de riesgo, como haber tenido relaciones sexuales sin protección, compartir agujas o instrumentos cortantes, recibir transfusiones de sangre o tener una madre infectada.

TRATAMIENTO:

No existe una cura específica para la hepatitis B, pero hay tratamientos que pueden ayudar a controlar el virus y prevenir las complicaciones. El tratamiento depende del tipo y la gravedad de la infección.

PARA LA HEPATITIS B AGUDA: 

EL tratamiento suele consistir en reposo, hidratación y medicamentos para aliviar los síntomas. La mayoría de las personas se recuperan sin necesidad de tratamiento antiviral.

PARA LAHEPATITIS B CRÓNICA:

 EL tratamiento puede incluir medicamentos antivirales que reducen la replicación del virus y disminuyen el riesgo de cirrosis y cáncer de hígado. El tratamiento antiviral puede ser de por vida o temporal, según el caso. Algunos medicamentos antivirales son tenofovir, entecavir, lamivudina y adefovir.

Además del tratamiento médico, las personas con hepatitis B deben seguir algunas medidas para cuidar su salud, como evitar el alcohol y otras sustancias que dañen el hígado, llevar una dieta equilibrada y hacer ejercicio moderado.

PREVENCIÓN:

La prevención es la mejor forma de evitar la hepatitis B y sus consecuencias. Las principales medidas preventivas son:

Vacunarse contra el VHB:

La vacuna contra la hepatitis B es segura y eficaz, y se recomienda para todos los recién nacidos, los niños y los adultos en riesgo. La vacuna consta de tres dosis que se administran en un intervalo de seis meses.

Usar preservativos durante las relaciones sexuales. El preservativo reduce el riesgo de transmisión del VHB y de otras infecciones de transmisión sexual.

No compartir agujas ni instrumentos cortantes. El uso de material estéril evita el contacto con la sangre o los fluidos corporales de una persona infectada.

Hacerse pruebas para detectar el VHB. El diagnóstico precoz permite iniciar el tratamiento adecuado y evitar la transmisión a otras personas.

La hepatitis B es una enfermedad grave que puede prevenirse y tratarse. Si tienes alguna duda o crees que puedes estar infectado, consulta a tu médico.

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